martes, 24 de enero de 2012

La atención plena

La atención plena es la toma de consciencia. Consciencia de lo que estamos haciendo en ese preciso momento, en el ahora, donde estamos,  cómo lo estamos haciendo, para que, cómo nos sentimos…etc.
La mayoría de las cosas las hacemos automáticamente, siguiendo una serie de patrones o roles. Y  pasamos la mayoría de nuestra valiosa existencia divagando entre proyecciones al futuro y recuerdos del pasado.
La atención plena o toma de consciencia nos permite disfrutar de cada momento, vivirlo, y también darnos cuenta de si realmente estamos haciendo lo que realmente queremos o sentimos, o estamos haciéndolo siguiendo unos patrones que no van con nosotros. Y al mismo tiempo observar porqué lo estamos haciendo: por quedar bien, miedo al rechazo, a la critica, por ser “formal”, por conseguir algo, manipular, cumplir con cierto rol, inseguridad…etc.
Con lo cual nos ayuda a conocernos mejor a nosotros mismos, deshacernos de conductas, situaciones, ambientes con los que no nos sentimos bien. Y ser más fieles a nuestro ser, con sus consiguientes efectos en nuestro bienestar y salud.

domingo, 22 de enero de 2012

La queja

Las cosas se pueden vivir desde el sufrimiento o desde la aceptación y el disfrute. Cada uno decide.El ser feliz y brillar suele dar mucho miedo, mucho más que vivir en la queja, la crítica o el alma en pena. Por eso, si se decide ser feliz, se requiere práctica. Se puede empezar por simplemente observar y darse cuenta de cuántas quejas hacemos al día: del tiempo, del tráfico, el semáforo, el jefe, el trabajo...etc. Te sorprenderás.

lunes, 16 de enero de 2012

Recuerdo

Recuerdo cuando me sentía tremendamente sola estando acompañada.
Recuerdo cuando no me sentía respetada, querida, amada.
Recuerdo cuando no me sentía escuchada.
Cuando me sentía abandonada.
Y esperaba, esperaba, esperaba.
Y no venía, y no llamaba.
Y dolía, dolía, dolía.
Y lloraba y me enfadaba. Pataleaba y esperaba.

Recuerdo cuando pensaba e intentaba entender y no entendía.
Leía, escuchaba teorías y pensaba y pensaba.
Me dolía y no me podía ir. Dolía y lo deseaba.
Mi cabeza creía saber pero mi corazón no podía.
Y me sentía incapaz, rara, culpable, confusa.


Entonces me dejé sentir, me rendí.
Y lloré, miré, observé.
Me sentí muy pequeña, débil, sola, manipuladora, controladora, triste.
Y seguí mirando, sintiendo.
Sentí, lloré, miré pero no me juzgué, no me castigué. Me abracé.

Entonces empecé a acompañarme.
Empecé a respetarme, quererme, amarme.
Empecé a escucharme.

Ahora recuerdo.

martes, 10 de enero de 2012

Las respuestas las tienes tú

Después de años de búsqueda de la felicidad y respuestas en relaciones encadenadas,libros, comidas, productos químicos, bebidas, terapias varias etc.Resulta que están dentro de mí.Solo hay que hacer una pequeña "gran" limpieza interior.Pasar bien la escoba e ir sacando brillo.

QUERERTE  CREERTE  MIMARTE  RESPETARTE

lunes, 9 de enero de 2012

¿Quien soy?


Agua que fluye. Agua que va dejando atrás todo lo que la enturbia. Agua cada vez más transparente que se junta, funde o resbala con los elementos y seres que se va encontrando en su camino. A veces se estanca en algún pozo, otras se congela y reposa, también se evapora y vuela. Agua.